viernes, 11 de agosto de 2023

Talleres "Clásicos al detalle", innovando el visionado

La experiencia de ir al cine es siempre diferente a ver las películas en plataformas digitales. Es una experiencia distinta (complementaria, no disyuntiva a las plataformas) en la que se produce una inmersión del espectador n la imagen y sondo de sala. Algunas sesiones tienen el enriquecimiento de tener una presentación o un coloquio posterior donde comentar la película con el director o alguien del equipo (Q&A, Preguntas y respuestas)... o entre el propio público si hay un moderador (cinefórum).

La innovación de estos talleres de "Clásicos al detalle" supone un grado más de inmersión en el análisis y comentario de una película en sala de cine y de la experiencia enriquecida de poder comentar y analizar con un grupo de personas (conocidas o no) haciendo hincapié en cualquier aspecto formal, argumental o estético relevante de la película. Aunque cada taller es único y personalizado, la idea general es ir viendo entre todos la película en pantalla grande con un análisis secuencial (cada ciertas secuencias se para y se analiza). En cada parada, a parte de ir entendiendo los diversos sentidos del argumento, se analiza algún fotograma, plano o detalle particular así como la explicación del rodaje de alguna escena o referencias de otras películas anteriores de esa misma secuencia.  Es importante que en cada corte y parada no se pierda el hilo argumental y emocional del argumento de la película. Una vez vista entera la película a partir de tu "troceado fílmico", se hace un análisis global sobre temas, personajes, el guion general o las escenas que más han impactado a cada uno de los participantes. La idea de los talleres también es ir aprendiendo de lenguaje cinematográfico (planos, movimientos de cámara, montaje,...), no ya como realizadores, sino como espectadores que quieren aprender a mirar. La duración de cada taller es de unas 4 ó 5 horas (y casi siempre se ha quedado corto de tiempo)

Contado así, puede parecer un tanto abrumador pero la experiencia de los que han participado en los talleres en cine Embajadores este mes de agosto de 2023 ha sido muy satisfactoria. Tanto es así que los que han ido una vez han repetido, incluso recomendado o traído directamente a otros amigos al siguiente taller. Incluso ha tenido un efecto terapéutico en algunas participantes porque han visto una manera nueva de ver películas clásicas que por diversas razones se habían atragantado u olvidado. Además, se ha producido el efecto "despertar el gusanillo" intelectual de forma que muchos participantes en el taller matinal luego se han dedicado a buscar más información, leer libros asociados incluso volver a ver la película en su casa por la tarde para terminar de degustarla.

Para los más escépticos, la experiencia de estos talleres de Clásicos al detalle hay que probarla in situ para tener conciencia de lo que es. Parafraseando a Morfeo en MATRIX: "Una cosa es conocer el camino y otra, muy distinta, es andar el camino" ¡Andemos, pues!

martes, 24 de enero de 2023

Comisariado cinematográfico


El termino "comisario" o "curador" (del inglés curator) se usa en el ámbito de las artes visuales, concretamente en las exposiciones de arte. No podríamos entender el fenómeno cultural que supone una exposición sin el comisario de arte. Al fin y al cabo, estamos hablando de una de las figuras más relevantes del ecosistema museístico y expositivo actual.

En el ámbito del cine, no se emplea tanto ese término (porque no hay ocasión de ello) pero en la última década Beatriz y yo estamos dando ejemplo vivo, al igual que los programadores de cine independiente, de que el "comisariado cinematográfico" es posible y así lo estamos llevando a cabo en nuestras sesiones especiales de cortometrajes en cines.

El visionado como público de numerosos cortometrajes en festivales y el gusto por el cine en general nos ha hecho preocuparnos por crear sesiones de cortometrajes ad hoc. Sesiones en las que seleccionamos los trabajos que nos han resultado más significativos y estimulantes. La selección implica, a veces por motivos diversos, unos descartes inevitables y a veces dolorosos. La agrupación de los cortos conlleva una relación entre ellos, un leit motiv que los agrupe y los cohesione (aunque sus autores los crearon individualmente), dando un sentido nuevo y artístico a la sesión. Ello, además, de tener siempre presente las consideraciones prácticas de visionado que nos ha dado la experiencia como espectadores: que en una sesión nunca haya menos de 4 cortos ni más de 6 (que es lo que una persona normal ve sin cansarse), que la duración total de proyección no sean mayor de 90-100 minutos (lo ideal son 75 minutos) y que la sesión esté enriquecida con presentaciones, comentarios y análisis sobre los cortometrajes al finalizar.

La figura del "comisario de arte" siempre ha estado rodeada, a veces, de pábulo, grandiosidad e importancia (a veces un tanto impostada),.... pero abogamos por un nuevo comisariado que, al igual que la crítica que hace, por ejemplo, Juan Antonio Moreno, debe ser humilde, debe ver la grandeza de los trabajos y esfuerzo realizados y que su misión sea difundirlo y realzarlo para que lleguen a muchas más personas, que todos disfruten del conjunto y que sea verdaderamente edificante para el ámbito cultural.

Caminamos y luchamos porque los cortometrajes se vean en pantalla grande, en salas de cine, con calidad, con la idea y sensibilidad para la que fueron creados. Y dado que actualmente no existe tendremos que dar un paso adelante para crear una distribución comisariada de sesiones de cortometrajes en cines. En ello estamos. Seguimos caminando.

martes, 10 de enero de 2023

Inmersión


La palabra inmersión se usaba frecuentemente en submarinismo porque al entrar y sumergirte en el agua cambiabas de mundo y todo tu espacio físico quedaba rodeado por otra sustancia (agua) que te hacía cambiar de ámbito. Se habla de inmersión lingüística cuando entras en un entorno social con un idioma y cultura diferente al tuyo y tienes que defenderte sin más apoyo que tu propia mente y conocimientos.

Del mismo modo, el hecho cultural conlleva una inmersión, un escapar del mundo cotidiano para sumergirte en un entorno diferente, aislado, ensoñador y a veces onírico. Cuando se debate sobre la dicotomía entre ver una película en una sala de cine frente a las plataformas en la TV de casa, la diferencia radica en eso: la inmersión, en estar "cautivo" y aislado y sólo frente a la obra y las condiciones de oscuridad, sonido y atención para zambullirte y empaparte de la película. Cuando uno se sumerge en la lectura de un libro necesita del silencio, la tranquilidad y el momento adecuado para lograr esa inmersión. Muchas veces, en conciertos de música o en el teatro en vivo se exige que no haya ningún ruido, ni luces de móviles, precisamente para eso, para no romper la inmersión que conlleva un aislamiento y alimento interior del hecho cultural que se está disfrutando. Y precisamente por ello, a veces, en el ámbito de la música, por ejemplo, puede parecer extraño pero lógico que haya gente que prefiera escucharla con unos cascos de calidad con cancelación de ruido, en una habitación oscura, sólo con uno mismo, en lugar de en un concierto en vivo con mucha gente donde los ruidos, los móviles, los movimientos y las conversaciones hacen precisamente eso: sacar de la inmersión. 

Cada vez se busca más la experiencia de inmersión aunque no es fácil. Mucha gente vive cómoda y habituada en el ambiente ruidoso y no soporta, por ejemplo, quedarse en los créditos de una película cuando la música y el momento no está pensado precisamente para salirse del cine.... sino para ir saliendo poco a poco de la inmersión que supone la propia película antes de volver a la realidad.

Como gestores culturales, tengamos siempre presente este concepto en los planteamientos, actividades y eventos que organicemos.  Como comentamos en anteriores reflexiones, lo que debemos organizar no es un acto en sí sino la creación de una experiencia. A la postre es lo que el público se lleva. Así que que intentemos que dicha experiencia sea siempre y por todos los medios.... inmersiva.